Las personas con movilidad reducida pueden encontrar complicada la vida más allá de sus hogares. No poder caminar por la calle puede parecer realmente impeditivo, pero para esas personas existe la opción de los scooters eléctricos.
Estos vehículos eléctricos pueden circular por la acera cuando esta vía esté preparada (contar con rebajes para que la persona con movilidad reducida pueda bajarse de ella), o por el arcén o margen derecho de la calzada si la acera no está preparada.
Si la persona quiere ir más lejos y necesita coger el transporte público, desde Tuttiscooter les recuerdan que los scooter de movilidad reducida y silla de ruedas eléctricas pueden subir a los autobuses siempre que esté adaptado para ello.
Del mismo modo, los usuarios pueden entrar en todo tipo de comercio siempre que el establecimiento cumpla las normas de accesibilidad.
“Ya son muchos los usuarios que acuden a las farmacias, supermercados y restaurantes con un producto de movilidad reducida”, aseguran desde la empresa con más de veinte años de experiencia.
Vehículos seguros
Tanto los scooter como las sillas de ruedas funcionan por pulsación: una vez el usuario deja de pulsar el producto, se detiene en el momento. Esto supone un extra de seguridad en caso, por ejemplo, de que el usuario sufra algún desvanecimiento.
Del mismo modo, si el aparato detecta que está siendo arrastrado, se activarían los electro frenos y las ruedas se frenarían. En caso de calentamiento, los scooter disponen de un térmico de seguridad y se desconectaría.
Tanto los scooter como sillas eléctricas disponen de una señal acústica de marcha atrás para avisar a las personas del entorno. Pero la seguridad en scooters eléctricas nunca deja de avanzar, y en los modelos más novedosos se ha incluido, además, un sensor que frena en caso de que el scooter se aproxime a un obstáculo.
Novedades en scooters eléctricos
Las tendencias en este sector van hacia reducir el peso de los vehículos y hacerlos plegables. Tuttiscooter dispone de una silla eléctrica de 14 kilos de peso, en fibra de carbono, que soporta 136 kilos. Y un scooter plegable con más de 30 kilómetros de autonomía y peso reducido.