La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió hace unos días de la presencia en el sur de Europa de mosquitos con virus como el dengue o el zika en su organismo.
El doctor y catedrático Manuel Segovia, jefe del área de microbiología del hospital de la Arrixaca de Murcia, explica que el virus del dengue “genera un cuadro clínico parecido a la gripe, pero con diferentes intensidades”.
Por otra parte, el zika “es transmitida de una forma muy parecida. Produce también un cuadro gripal, pero en la mayoría de los casos es más benigno que el generado por el virus del dengue. Lo que más alarma produce de este virus es que puede atravesar la placenta y afectar al desarrollo del feto si se contagia una mujer embarazada”, explica el doctor Manuel Segovia.
Riesgo medio-bajo
La presencia de estos virus ha puesto en alerta a diversas poblaciones del sur de Europa. El jefe de microbiología del hospital de la Arrixaca recuerda, en este sentido, que ya ha habido casos de este tipo de virus en España, y que “seguro que tendremos en el futuro casos de zika o de dengue, pero ¿que eso cause un problema de salud pública porque se infecte mucha gente? Eso es muy poco probable”.
El entomólogo y profesor del Departamento de Zoología de la Universidad de Murcia, Francisco Collantes, a este respecto explica que la transmisión a través de vectores como los mosquitos “no funciona como si fueran jeringuillas, que pican a uno y luego a otro y ya lo han transmitido. El mosquito tiene que tener la capacidad de que el patógeno desarrolle su ciclo dentro de él, y esto no pasa con todos los mosquitos”.
Transmisión del virus
Aunque el aumento del número de mosquitos tigre (que sí pueden transmitir estas enfermedades) que estamos sufriendo en España podría traducirse en la aparición de casos de transmisión autóctona de virus como el dengue o el zika, el jefe de microbiología de la Arrixaca explica que esto no es exactamente así, porque tendría que darse el caso de que hubiera una persona infectada en España, que es poco frecuente. Al mismo tiempo, el cuadro vírico que provocaría la transmisión dura muy pocos días. Durante este período de tiempo tendría que picarle a una persona un mosquito que pueda ser vector, es decir, que el virus pueda replicarse dentro de su organismo y después, en pocos días, picar a otra persona.
En este nuevo escenario epidemiológico, “el riesgo en cuanto a presencia de vectores es alto, pero el riesgo de transmisión de enfermedades es medio-bajo, ya que no llegan tantos enfermos con estos virus a España. Además, las cepas que llegan a España no son tan compatibles con el mosquito tigre como otras cepas que aparecen, por ejemplo, en Italia”, asegura el entomólogo Francisco Collantes.
Cambio climático
La posibilidad de que enfermedades como el dengue o el zika se asienten en nuestro país es de momento muy baja, ya que las hembras de mosquitos, en las que se mantienen los virus una vez infectadas, no suelen sobrevivir al invierno, por lo que el ciclo de transmisión se interrumpe en este periodo del año.
Con el cambio climático y el aumento de las temperaturas, se teme que estos mosquitos puedan permanecer activos durante todo el año.
El entomólogo explica que “el desarrollo de los mosquitos depende de umbrales de temperatura. Si las temperaturas son muy bajas, no pueden reproducirse, y si son muy altas, se mueren. Por eso, durante la primavera salen en las horas centrales del día, y durante las horas más frías buscan sitios donde no haya temperaturas tan bajas. En verano, en cambio, a mediodía no salen porque se deshidratarían, y salen y pican a la hora del crepúsculo”.
El aumento del calor ocasionaría que hubiera mosquitos durante más meses al año, ya que no se alcanzarían temperaturas lo suficientemente bajas durante el tiempo necesario para que cese su actividad reproductiva. “Y al contrario, en verano y con las temperaturas que alcanzaríamos tan elevadas, disminuirían drásticamente las poblaciones de mosquitos”, concluye el entomólogo.