La población está tomando conciencia sobre la importancia de tener una buena higiene postural, pero a menudo los trabajos impiden o dificultan mantener unas posturas saludables todo el día. La consecuencia son las lesiones, que se pueden evitar con un cuidado preventivo. En este aspecto, el papel del fisioterapeuta es fundamental.
Sara Rufete, fisioterapeuta y gerente de Clínica Atlas en Murcia explica que, además de tratar lesiones y molestias, “indicamos a nuestros pacientes unas pautas de ejercicio y movilidad de diferentes partes del cuerpo, siempre personalizándolo, según el tipo de trabajo que tenga cada uno de ellos. Es importante que intenten levantarse cada dos horas y hagan los ejercicios, no van a tardar más de cinco minutos. Además, cuando se sientan de nuevo, lo hacen con una postura correcta. Esto crea una conciencia corporal en el cuerpo que hace que cada vez cojas mejores posturas”.
Los profesionales de la fisioterapia también pueden dar consejos para mejorar el ambiente de trabajo, o recomendar accesorios de ayuda como alzadores para los pies o reposabrazos.
El fisioterapeuta en caso de lesión
A menudo se normaliza sufrir dolores articulares después de una jornada de trabajo o cada cierto tiempo. Sara Rufete advierte de que en estos casos recurrir a la automedicación con analgésicos “no es más que un parche y no nos va quitar el problema. El cuerpo no duele por doler, es una alerta”.
En estos casos, no acudir al fisioterapeuta puede provocar que el dolor se extienda a otras partes del cuerpo, que se adopten malas posturas y que se cronifique.
Pero el fisioterapeuta no solo actúa sobre las lesiones físicas más evidentes. A menudo, los dolores de cabeza, el insomnio o el malestar intestinal pueden tener su origen en una lesión o problema en nuestros huesos o músculos. En estos casos, el fisioterapeuta puede detectar el origen del problema y combatirlo.
En el caso de Clínica Atlas, en Murcia, su gerente apunta: “No damos un masaje sin más, sino que intentamos ver qué está ocurriendo, si el paciente adopta malas posturas o su alimentación es deficiente. Tenemos que saber sobre su vida porque quizá está haciendo una dieta que es inflamatoria, y hay que derivarle al nutricionista para aliviar la inflamación y eliminar el dolor. Si es un problema de estrés lo que le está generando el dolor físico, le derivamos al psicólogo. También viene gente que se queja de dolor y observamos que no hace deporte. Y le decimos que tiene que hacer ejercicio físico porque sus músculos le están avisando de que no pueden más, y eso puede afectar a sus huesos y al resto de su cuerpo”.
Yoga y pilates
Una manera de fortalecer el cuerpo y contrarrestar las horas que podemos pasar haciendo malas posturas en el trabajo es el ejercicio. Una opción segura y útil es combinar yoga y pilates.
El pilates consiste en ejercicios más intensos, de fuerza, y el yoga estira y aumenta la amplitud de movimiento. Combinar estas técnicas, con la ayuda de un profesional cualificado que nos guía, ayuda a fortalecer y estirar nuestro cuerpo.
En el caso de Clínica Atlas, en Murcia, ofrecen clases personalizadas de 5 o 6 personas, con una profesora que guía cada grupo en función del estado físico de sus componentes y de las posibles lesiones que hayan tenido.
“Tener este servicio dentro del centro de fisioterapia resulta muy beneficioso, porque si una persona aparece con un dolor en una articulación, puedo informar a la profesora de lo que debe hacer, y la profesora estará pendiente de que el paciente realice de manera correcta cada ejercicio”, concluye la fisioterapeuta Sara Rufete.
